El noveno día de nuestro viaje comenzó con un último desayuno en el hotel de Aqaba, frente al Mar Rojo que tantas sorpresas nos había regalado en los días anteriores. Después, tocaba hacer las maletas, hacer el check out y poner rumbo al aeropuerto para despedirnos de Jordania.

Camino al aeropuerto de Aqaba

El trayecto fue breve, apenas unos minutos en coche desde el hotel hasta el Aeropuerto Internacional Rey Hussein en Aqaba. Allí devolvimos el coche de alquiler en la oficina de Dollar Car Rental, el mismo que nos había acompañado durante toda nuestra ruta de norte a sur por el país.

A las 12:05 despegaba nuestro vuelo con destino Budapest, donde haríamos escala antes de regresar a España. Elegimos esta opción porque era la forma más económica de regresar, aunque supusiera alargar un día más el viaje. Y sinceramente, no nos importó: cualquier excusa es buena para seguir viajando y descubrir nuevas ciudades.

De Aqaba a Budapest: un cambio de escenario

En menos de cuatro horas pasamos del calor del desierto y el Mar Rojo a las orillas del Danubio. A nuestra llegada a Budapest, lo primero fue cambiar algo de dinero a florines húngaros y dirigirnos en Bolt hasta nuestro hotel. La tarde la dedicamos a relajarnos en el balneario Széchenyi, un clásico de la ciudad, y al caer la noche navegamos por el Danubio iluminado, con las fachadas del Parlamento y los puentes brillando como si fueran de oro. La jornada terminó en el mítico ruin pub Szimpla Kert, rodeados de viajeros de todas partes del mundo.

Reflexión y despedida de Jordania

Aunque la aventura continuaba en Budapest, ese día no podíamos dejar de pensar en lo que habíamos vivido en Jordania. Hacer la ruta de norte a sur y salir por Aqaba en lugar de Amán fue, sin duda, una de las mejores decisiones de nuestro viaje. Mientras muchos optan por rutas rápidas y circulares que empiezan y terminan en la capital, nosotros preferimos una experiencia más tranquila y progresiva, descubriendo cada rincón del país sin prisas:

• Los restos romanos de Jerash, que nos transportaron a otra época.

• La magia única de Petra, donde el amanecer y el Tesoro quedarán para siempre en nuestra memoria.

• El silencio absoluto del desierto de Wadi Rum, que nos regaló noches bajo un cielo estrellado.

• La calma y la vida submarina del Mar Rojo en Aqaba, un auténtico tesoro natural.

Jordania nos despidió como lo había hecho cada día: con hospitalidad, paisajes únicos y esa mezcla de historia y naturaleza que convierte cada instante en inolvidable.

Salir por Aqaba fue como cerrar un libro desde la última página, recorriendo cada capítulo de norte a sur, dejando que el viaje fluyera con calma. Nos marchamos con la sensación de haber vivido Jordania de verdad, de haber saboreado su esencia sin prisas y de llevarnos recuerdos que permanecerán para siempre.

Día 10 de nuestro viaje: regreso a España

El último día amaneció en Budapest. Tras un rápido desayuno en el hotel, recogimos las maletas y a las 9:00 tomamos el bus 100E directo al aeropuerto. Si lo prefieres, también puedes contratar un traslado privado en CIVITATIS. Allí facturamos el equipaje y, a las 12:05, despegaba nuestro vuelo rumbo a Madrid.

A media tarde aterrizamos en España, cerrando así un viaje que había sido mucho más que unas vacaciones: un recorrido por la historia, la cultura y los paisajes de un país fascinante.

Conclusión y cierre del viaje

Nuestra ruta de diez días nos permitió conocer Jordania a un ritmo tranquilo y auténtico, disfrutando de cada etapa del camino: del norte histórico de Jerash al sur marino de Aqaba, pasando por Petra y Wadi Rum, dos de los lugares más mágicos del planeta. Y aunque nos esperaba de nuevo la rutina, volvimos con la maleta cargada de recuerdos, fotos y momentos que ya forman parte de nuestra historia viajera.

🔐 Viaja seguro, siempre

Antes de despedirnos, queremos recordarte la importancia de viajar protegido. Jordania nos enseñó que cada día puede traer nuevas aventuras, ya sea en un cañón, bajo el agua o en medio del desierto. Para vivirlas con tranquilidad, contar con un buen seguro de viajes es fundamental. Nosotros confiamos en HOLINS, y con el código VIAJEROSNONSTOP10 obtendrás un 10% de descuento en tu póliza. Así podrás concentrarte en lo que realmente importa: disfrutar de cada destino y dejar que el viaje te sorprenda.