Día 8 en NY: Coney Island

Amanece en Nueva York un día soleado con un tiempo increíble, nada que ver con el de ayer (¡qué pena que hoy nos vamos!). Así que recogemos todas nuestras cosas, dejamos las maletas en la recepción del hotel y ponemos rumbo a aprovechar nuestro último día en New York (el vuelo sale a las 22:00 horas).
Cementerio de Green-Wood
Como ayer no pudimos ir a Coney Island, hoy no podemos dejarlo pasar, pero antes, haremos una parada en el cementerio de Green-Wood. Justo al bajarnos del metro vemos un Dunkin’ Donuts (¡qué mejor desayuno despedida!) y cogemos fuerza para el día (que será duro).
El cementerio de Green-Wood es muy grande. Nada más llegar te entregan un mapa. La verdad que es imposible verlo entero en unas horas, pero con adentrarse un poco enseguida se contempla la belleza de los mausoleos, los árboles y jardines. Evidentemente, no tiene nada que ver con los cementerios latinos y para variar te recordará a escenas de películas que has visto infinidad de veces en películas americanas. Visita recomendada si tenéis tiempo.






Coney Island
Desde el cementerio de Green-Wood volvemos a coger el metro para bajarnos en la parada de Coney Island – Stillweel Av Station y en 5 minutos llegamos al LUNA PARK, el parque de atracciones más famoso de Nueva York por su temática vintage de los 60. La entrada al parque es gratuita, pero sus atracciones son de pago.



La atracción por excelencia, y que debes probar si te gustan las emociones fuertes, es Cyclone, una montaña rusa de madera que lleva funcionando desde el año 1927 y tiene el título de la más antigua del mundo. El ticket para subir cuesta 10$.

También encontrarás una zona llena de atracciones infantiles y otras dos zonas reservadas para aquellos que necesitan un poco de adrenalina. En todo momento vivirás en un ambiente que te recordará a las típicas películas americanas, con los puestos de algodón de azúcar, perritos calientes, patatas fritas y hasta la mujer barbuda!
Junto al Luna Park se encuentra el paseo marítimo de Coney Island y su playa. Nada que ver con la de España, pero es muy amplia y hay un muelle donde muchos pescadores aficionados echan el día y desde el que tendrás unas vistas maravillosas de todo el complejo de ocio.




El mejor perrito caliente de Coney Island: Nathan’s
Como es de esperar, a lo largo del paseo marítimo hay muchos fast-food, pero uno de ellos es el más popular y el que siempre está a rebosar. Hablamos de Nathan’s, donde nos comimos el perrito caliente más sabroso de New York. Muy muy rico. En Coney Island, tienen dos restaurantes: uno a la entrada del parque junto a la calle por la que vienes del metro y el otro en pleno paseo marítimo. Os recomendamos este último para disfrutar de vuestro almuerzo con vistas al mar.




Nos hubiera gustado ir por la tarde y disfrutar de la puesta de sol y del parque iluminado, ya que al ir al mediodía, no fue lo mismo, pero lo disfrutamos igualmente.
Últimas horas en New York
De nuevo en el metro, volvemos a Manhattan para aprovechar las últimas horas en New York. Nos bajamos en la 23 St para admirar el Edificio Flatiron y pasear por las calles del Middtown hasta Times Square. Aquí veremos al famoso Nacked Cowboy (vaquero desnudo) con botas y sombrero de cowboy, una guitarra tuneada y unos calzoncillos de talla pequeña para niños de 12 años.





Regreso a Madrid
Sobre las 18:00 horas regresamos al hotel para recoger las maletas y dirigirnos al aeropuerto de NEW YORK NEWARK y coger nuestro vuelo a las 22:00 horas con la compañía VIRGIN ATLANTIC, dirección LONDON HEATHROW. Allí haremos una escala de 2 horas (que entre que te bajas de un avión y te subes en otro, se pasa volando) y aterrizaremos en Madrid a las 17:30 horas con la compañía BRITISH AIRWAYS.
Y hasta aquí nuestros 8 días en la gran manzana. Esperamos que os haya gustado y que os animéis a viajar a esta ciudad mágica siguiendo nuestra ruta.