Segundo día recorriendo la Suiza Alemana. Hoy nos espera un día de nieve y es que venir a este bello país y no disfrutar de sus montañas y sus pistas de esquí sería un auténtico delito. Sin embargo, si no esquías, porque no sabes o no te gusta (como nuestro caso), os recomendamos visitar el Monte Titlis para disfrutar de la nieve y de los Alpes Suizos de una forma diferente.
Madrugamos y nos levantamos a las 07:00 para desayunar en el buffet del hotel (incluido en el precio) y abandonar el hotel rumbo a nuestro próximo destino. Sobre el desayuno tenemos que dar el visto bueno porque fue muy bueno y variado y además con las vistas al lago de Lucerna y un sol espléndido brillando en el cielo.
ENGELBERG
Para subir al Monte Titlis, tenemos que llegar a la comuna suiza de Engelberg situada a unos 30 minutos del hotel donde nos hemos alojado.
Engelberg es la estación de esquí más grande y, según los lugareños, también la más bonita, de Suiza Central. Sus 2000 metros de altitud invitan a practicar snowboard, esquiar o deslizarse en trineo. Un completo programa invernal aporta variedad a las típicas vacaciones de esquí.
Allí aparcamos el coche en un parking público cercano a la estación de esquí: el Gerschniweg 8 Parking.
EL MONTE TITLIS EN TRES PARADAS
Para subir a la cima del Titlis primero nos dirigimos a las taquillas de la estación de esquí (Titlis Bergbahnen) para comprar el forfait del Titlis Express. Su precio es de 65 CHF por persona (unos 55€) en la temporada de invierno (y 92CHF en verano) y es válido desde la apertura a las 08:30 hasta el cierre a las 17:00 horas. Si no vais a esquiar, os recomendamos madrugar igualmente para acceder a los puntos clave sin aglomeraciones de esquiadores. Las 09:00 de la mañana es buena hora para empezar a subir.
Con los forfaits en la mano debes seguir las indicaciones de TITLIS EXPRESS que te llevarán a coger el primer telesilla.
A continuación, os explicamos cómo está dividido el Monte Titlis en 3 estaciones:
- Estación 1: Trübsee. Aquí se encuentra el parque de nieve, el parque de motos de nieve, el pueblo iglú (restaurante + hotel), la pista de patinaje sobre hielo, el Lago Trübsee y varios restaurantes.
- Estación 2: Stand. En este nivel hay un restaurante y es donde se coge el Titlis Rotair, el único teleférico del mundo que gira 360º sobre sí mismo para ofrecer una panorámica completa de los Alpes Suizos.
- Escación 3: Titlis. En la cima del Monte Titlis se encuentra el puente colgante, la cueva glaciar, un telesilla para ver las grietas de 10 metros de los graciares, el mirador Stotzig Egg y el parque glacier. Además hay varios restaurantes, tiendas de souvenirs, la tienda de chocolate Lindt, un photo studio para caracterizarte como un auténtico suizo, una heladería y por si fuera poco, una tienda de relojes. Todo ello dividido el 5 niveles a los que se accede bien en ascensor o bien por escaleras.
Visto la cantidad de esquiadores que iban en peregrinación para coger el telesilla, decidimos subir directamente a la cima para luego ir bajando niveles poco a poco.
El primer telesilla lo cogemos en la estación de Engelbert y nos bajamos en la estación de Stand. Allí «hacemos transbordo» para coger el Titlis Rotair (el teleférico que gira 360º sobre sí mismo).
Arriba, saliendo por el Nivel 5, las vistas son ESPECTACULARES. Hace mucho viento, parece que vamos a salir volando en cualquier momento, pero brilla el sol y la sensación es inexplicable.
Nada más salir, giramos a la derecha para disfrutar de las vistas desde el Mirador Stotzig Egg y hacer las primeras fotos del día.
Desde ahí nos dirigimos al Titlis Cliff Walk, el puente colgante a mayor altitud de Europa y con una caída al vacío de 500 metros. Cuando nos acercamos a él empieza a levantarse una ventisca que nos hace dudar de si atravesarlo o no, pues la altura impone. Eso sí, está muy bien fijado y apenas se mueve. Sientes el viento chocar con la estructura, pero te sientes seguro. Tuvimos suerte de que tan sólo una pareja se atrevió a cruzar sus 100 metros de longitud con nosotros y cuando se fueron pudimos hacernos decenas de fotos sin gente. Si nos despistamos, nos pilla la ventisca. Nos bajamos justo a tiempo. Fue una gran experiencia.
El telesilla para ver las grietas de 10 metros (Ice Flyer) y el parque glaciar estaban cerrados por el temporal y nos comentaron que volvería a estar en funcionamiento a mediados de Abril, así que pasamos a investigar el interior de la estación:
- Restaurantes: en el interior de la estación nos encontramos con diferentes espacios de restauración como el Titlis Panorama Restaurant (a la carta), el Self-Service Panorama Restaurant (auto-servicio) y el Mövenpick Ice Cream Bar (donde degustar unos deliciosos helados). Como imaginaréis, los precios de los restaurantes a 3000 metros de altura son igual de elevados que su ubicación sobre el nivel del mar. Sin embargo, os recomendamos asomaros a sus ventanales para seguir disfrutando de las vistas a los Alpes y tomando fotografías.
- Tiendas: hay que destacar que dentro de la estación tampoco hay mucha variedad. Encontraréis la típica tienda de souvenirs del Titlis, un Photo Studio donde podrás hacerte una sesión de fotos vestido con el traje nacional de Suiza, una tienda de relojes (en Suiza cada 10 hay una tienda de relojes) y, como no, la tienda de chocolate Lindt, que no nos pareció nada cara.
Vistos los 5 niveles de la estación del Titlis, procedimos a descender. De nuevo subimos al Titlis Rotair y nos bajamos en la estación de Stand. Aquí, la verdad que si no esquías, poco puedes hacer, más que más fotografías.
Volvemos al telesilla y bajamos hasta Trübsee, donde pasaremos el resto del día. En el interior de la estación encontramos tiendas de alquiler de equipación para esquiar y hacer snowboard, alquiler de patines y un restaurante.
En el exterior se encuentran las pistas de esquí y la zona de ocio familiar en la que es imposible no pasárselo bien. Hay una pequeña pista de patinaje y un parque de nieve en el que podrás tirarte en rosco y trineo (tanto niños como adultos) tantas veces como quieras y de forma gratuita. ¡Divertidísimo!
Muy cerquita del parque de nieve se encuentra el Pueblo Iglú. Aquí hay un bar/restaurante cuya especialidad es la fondue de queso y un hotel donde vivir la experiencia de dormir en un iglú además de relajarte en un jacuzzi al aire libre con agua caliente. ¡Una experiencia de cine!
Al lado del Pueblo Iglú se encuentra el SnowXPark, una pista de nieve para recorrer en moto eléctrica (a partir de 12 años).
Tras recorrer los puntos anteriores, paseamos por la nieve en paralelo al Lago Torbido (el cual tuvimos que imaginarnos, ya que estaba totalmente sepultado por la nieve) hasta el restaurante que se encuentra al otro lado del lado para descansar un rato y tomar un tentempié.
Pasadas las 16:00 horas volvimos paseando hasta la estación de Trübsee para coger el telesilla y descender hasta Engelberg. Hasta aquí nuestro maravilloso día en el Titlis (el último telesilla para bajar pasaba a las 16:30 horas y a las 17:00 cerraban).
De nuevo en el coche, ponemos rumbo a nuestro siguiente destino: Interlaken.
Hora y media de coche nos separaban de nuestro alojamiento para las próximas dos noches en Unterseen, una comuna y ciudad histórica suiza del cantón de Berna, situada en el distrito administrativo de Interlaken-Oberhasli.
SWISS BUDGET WINTER CHALET
En esta ocasión cambiamos el hotel por un apartamento/ático de dos habitaciones, baño y cocina para 4 personas:
- Por su ubicación cercana a la estación de tren para subir al Jungfraujoch.
- Por ofrecer estacionamiento gratuito justo en la puerta.
- Por su precio para 4 personas (de lo más asequible).
Dirección: Helvetiastrasse 29, 3800 Unterseen, Suiza..
Régimen: alojamiento.
Precio: 242€ (por dos noches).
Dejamos las maletas y fuimos a tomar algo al Hüsi Bierhaus (unas cervezas artesanales y unas patatas con parmesano).
Después paseamos y entramos en algunas tiendas de souvenirs, aunque lo que más predomina en Suiza son las tiendas de relojes. Nos tienen alucinados, puede haber hasta dos y tres tiendas seguidas en la misma calle, en la paralela.. ¡por todos lados!
Para cenar, caímos en la tentación de ir a lo seguro, básico y barato: McDonald’s (¡esta opción nunca falla!).
